The recent events in Afghanistan took place while we, at Womanity, were peacefully planning our September edition. The news hit us so hard that we felt the need to do something about it: something about those women who would be deprived again from their basic rights, something that could place our focus on a matter that concerns every human being and, especially, women: freedom.
We started all over again, in order to build up a FREEDOM issue: we challenged all previous contributors in an open call for this one, and I dreamt to have the chance to interview an Afghan woman.
There is a Portuguese saying that states ‘Be careful with what you wish for’… well, I wished high, and I was granted even higher: my good friend Laura Sagnier (@laurasagnier) called me and made a bypass to Laia Marsal Ferret, a great woman who helped Nilofar Ayoubi, an Afghan feminist and activist to escape from Afghanistan in one of the last planes that left the country, back in August. She introduced me to Nilofar and my interview came true. But she did more than that: she put me in contact with Angeles Espinosa, a correspondent for El Pais at Kabul, who kindly accepted my invitation for a short interview.
This edition, Womanity’s number 7, is an edition that fully shows how humanity fully lives inside every woman: 13 gave us their time (again), their words and their thoughts, a journalist shared the facts about what is happening now in Afghanistan, a woman gave us the chance to speak with an Afghan activist, and this one, despite being devastated by what she has lost and all the people she left behind, offered us her story.
I kindly ask you to read all contributions. If any, listen to what Nilofar and Angeles have to say: the lack of freedom should concern us all, and knowledge is the starting point for being helpful.
I am free if you are free.
You are free if she is free.
We are free if they are free.
Nilofar Ayoubi is an activist, a feminist, and an awarded best drama scriptwriter.
She is the CEO of the newspaper Asia Times of Afghanistan, Deputy Head of PMGGI (Peace, Media and Good Governance Institute), co-founder of AGAT and the founder of BIBI Maryam Foundation.
Nilofar is also the director of a furniture making workshop and the owner of a brand which revenue is used to support widows and orphan children. She is married and a mother of 3.
Marketing and communication expert for cultural issues
Nilofar Ayoubi managed to escape from Afghanistan on the 24th of August with the help of Laia Marsal Ferret, a marketing and communication expert for cultural issues.
They both accepted to be interviewed for Womanity Freedom in order to state the facts and the truth to what is happening to the people and women of Afghanistan.
We’re presenting a short version here, you can access the full one, here.
This testimonial is one that all of us should listen to. Please do: listening and remembering is the first way to help Nilofar, the women of Afghanistan and, finally, help every woman on her right for freedom.
Entrevista a Nilofar Ayoubi - Parte 1
Corresponsal de EL PAÍS.
Autora de ‘El tiempo de las mujeres’, ‘El Reino del Desierto’ y ‘Días de Guerra’.
Has estado recientemente en Afganistán, ¿verdad?
Sí, acabo de pasar dos semanas viajando por varias provincias del Este y el Noreste de Afganistán, no solo Kabul sino Nangarhar, Parwan, Panjshir, Wardak y Bamiyán, pero es por lo menos el duodécimo viaje que hago a Afganistán en los últimos veinte años.
¿Cómo se siente la situación desde dentro del país? ¿cómo se sienten las personas, en general?
Las situación es a veces un poco contradictoria porque, por un lado, yo no recuerdo haberme movido con tanta libertad desde el verano del 2002 cuando hice un viaje por carretera por prácticamente tres cuartas partes del país. La amenaza para la seguridad casi ha desaparecido desde que los talibanes están en el poder, ya que eran ellos los responsables de la mayoría de los asaltos y ataques que se producían por todo el país.
Al mismo tiempo, es la sensación de que esta tranquilidad es la calma que precede la tormenta.
El hecho de que a los talibanes se les recuerde por una dictadura brutal entre 1996 y 2001 hace que, antes de que hayan tomado medidas oficiales, ya se tema que van a ser igualmente de crueles que en aquella época. Pongo un ejemplo: el trato a las mujeres. De momento no han promulgado ninguna ley que establezca qué limitaciones van a tener; pero como en el anterior gobierno suyo, en su dictadura, prohibieron estudiar, trabajar e incluso salir de casa a las mujeres, las activistas, sobretodo aquellas que se han destacado más en la lucha por los derechos de las afganas, preventivamente han tomado medidas de protección. Y los primeros signos justifican que estén preocupadas porque, por un lado, han llegado noticias de represión de algunos funcionarios y funcionarias, incluso de ejecuciones sumarias, y, por otro, las primeras medidas que están tomando, apuntan en esa dirección discriminatória: han empezado a trabajar los funcionarios, pero a las funcionarias se les ha pedido que se queden en casa hasta que tomen no sé qué medidas de segregación en las oficinas. Lo mismo en las escuelas.
Por eso, ahora mismo prevalece la incertidumbre, se teme lo peor aunque todavía no está codificado.
Y a las mujeres, ¿cómo las has sentido?
Las mujeres se han convertido, sin duda, en el termómetro de hasta qué punto estos nuevos talibanes que, algunos con esa gracia que tienen para encontrar siempre frases pegadizas, han bautizado como Talibanes 2.0 porque es la segunda incursión en el poder de este grupo extremista suní. Y ¿por qué las mujeres se han convertido en el termómetro o en la medida de su comportamiento? Porque fueron la parte de la sociedad más castigada en su anterior dictadura, confinadas al hogar y sin permitírseles ninguna participación en la sociedad. Durante estos 20 años de la República, las mujeres han sido también el escaparate de los cambios sociales que se producían en el país. Su acceso a la educación, al trabajo, en todas las esferas, incluida la militar y la judicial, a pesar de todas las limitaciones que una sociedad tan tradicional y conservadora seguía imponiéndoles, ha sido tan sorprendente que ahora, cualquier paso atrás, no es que nos escandalice fuera, en Occidente, es que las propias afganas están temerosas de ello. Las mujeres están expectantes, confusas. He encontrado quienes todavia confían en la palabra de los talibanes y piensan que ahora no va a ser como en el pasado, hay algunas mujeres que me lo han dicho. Pero la mayoría de las activistas, de las mujeres profesionales educadas, urbanas, bueno, si han podido se han ido del país o están intentando salir; eso es el mejor indicador de cómo se sienten.
¿Qué les espera a las mujeres de Afganistán?
Pues, siguiendo con mi argumento anterior, esta es realmente la pregunta del millón porque los talibanes han suspendido el sistema político y la estructura social que existía hasta ahora, pero todavía no los han sustituido con su propio modelo que aún están tratando de perfilar.
Están negociando entre ellos – porque hay grupos diversos, los talibanes no son un movimiento monolítico – y también con actores externos, con países que están intentando influenciarles para moderar y limar las asperezas de un grupo que es muy radical y extremista, de cara a que pueda obtener la ayuda internacional que el país requiere para hacer frente a la grave crisis humanitaria que afronta. Hay falta de alimentos, falta de medios de subsistencia. Dos terceras partes de la población están por debajo de la línea de pobreza, es decir subsisten con menos de 1,5 euros al día, y la ONU proyecta que, sin ayuda exterior, va a incrementarse hasta el noventa y tantos por ciento en los próximos seis meses.
Entonces, hay un intento de influir, de convencer a los talibanes para que permitan que las mujeres participen en la sociedad, aunque sea con las limitaciones que se asocian con su interpretación de la ley islámica. Pero, ahora mismo, habría que tener una bola mágica para saber lo que les espera, qué va a pasar, qué grupo de talibanes va a triunfar: el más radical que quiere volver a meter a las mujeres en casa como en la dictadura anterior, o va a triunfar ese grupo de talibanes supuestamente más moderado y que está dispuesto a tolerar una participación limitada de la mujer, al estilo de la que puedan tener en otros países también de inspiración islamista como Irán o Arabia Saudi, aunque sigan dos ramas del Islam muy diferentes.
¿Qué podemos hacer nosotras, que estamos al otro lado de la barrera?
A mí me da miedo que seamos condescendientes.
He visto que algunos grupos de mujeres, con muy buena intención, han lanzado campañas de ‘salvemos a las afganas’.
Vamos a ver: las afganas tienen activistas y políticas muy comprometidas; francamente, no necesitan qué nosotras les salvemos, es una visión un poco colonialista. Pero es verdad que, en estos momentos, necesitan nuestro apoyo. Creo que es importante mantener la bandera del respaldo a sus reclamaciones; estar en contacto con las líderes afganas que están tanto dentro como fuera del país porque las necesidades y las perspectivas pueden ser diferentes. Es importante entender que Afganistán es un país diverso étnica, cultural y linguísticamente, también desde el punto de vista de la religión, también desde el punto de vista de la división urbana y rural – dos tercios de la población viven todavía en zonas rurales – y, con esos factores en mente, dar voz, prestar apoyo, a lo que estas mujeres digan que necesitan, pero no con la actitud de ‘vamos a salvarlas’, como si nosotras fuéramos la solución para sus problemas, porque nos falta ese contexto cultural tan importante para poner un marco a sus necesidades.
Una via de apoyo puede ser, sin duda, ayudar al reassentamiento de aquellas que han decidido, por su seguridad o su preocupación, marcharse del país. A la vez, hay que ser muy conscientes de que esa fuga de cerebros que supone la salida de estas mujeres poderosas y activistas tendrá también consecuencias a medio y largo plazo, en el sentido de que las niñas que quedan dentro del país pierdan modelos y referencias, Así que, el panorama no es blanco y negro, sino que tiene muchos tonos de gris y es muy complicado.
Resumiendo: escuchar a las afganas y ver qué nos piden ellas.
Enfermeira, Terapeuta Holística, Coach e Terapeuta de Tantra & Sexualidade Consciente
Amante da Natureza e de Viagens a solo. Destemida.
Alegre. Divertida. Amante do Prazer de Viver.
Curiosa. Aprendizagem e Amor é o que me faz mover!
Expressar-me a partir da minha autenticidade
Estabelecer os meus limites saudáveis e ser capaz de os pôr em prática
Fazer aquilo que me apaixona
Poder escolher o que quero e o que não quero para a minha vida
Dar voz à minha vontade pessoal
Mover-me sempre que quero e na direção do que pretendo
Permitir-me dar prazer a mim mesma, sem sentir culpa, vergonha ou medo
Giovane donna laureata in Arts Management.
Un colibrì in viaggio, dal Sud Italia fino a Marte.
In equilibrio tra terra e cielo, logica e cuore.
Amante del carboidrato, dispensatrice di sorrisi e combinaguai sistematica.
Have you ever wondered what
would happen if we suddenly stop
being consentient?
Have you ever suffered
the subtraction of words from
lips that formulate thoughts
to manifest existence?
Feel the void just to fill the overwhelming
sensation the heart is soaked through
in vain, bringing my feet to a standstill
firmly on mud.
I was left wrecked
because of me
my-self a woman.
Feminine in structure
with no burden of shame but
the one of being raised
by those who like to belittle
my own state of being.
Every corner of my body
is a milestone to me
yet soon it turns into a spring where
greedy men cheer with
pleasure to the detriment of
my florid intellect.
A veil on my face is an imperative
must hide from the realm of predators:
‘please, agree to be owned forever’
he says like I am a treasure.
Educated to silence
any impulse is crushed
in order to make them pillars while
I surrender at dusk.
No quicksand around
as long as I hold on to my-self
the freedom to be
as Just as Ice when it protects
the living floor beneath I had
to stand my ground for.
What I learned in this lifetime is
no less than to stay afloat
above all
it mattered to both:
we could have been saved
centuries ago.
Anos 90.
Curiosa e comunicativa.
Amante da Bossa Nova e da MPB.
Brasileira de nascimento, alemã de alma e portuguesa de coração.
Geminiana, com ascendente em Escorpião e Lua em Caranguejo.
Licenciada em Gestão de Empresas – Pontifícia Universidade Católica do Rio de Janeiro (PUC-RJ)
Especialidade em Análise Financeira – Fundação Getúlio Vargas Rio de Janeiro (FGV-RJ)
Formada em Culinary Arts – Escola de Hotelaria e Turismo de Lisboa
Membro da equipa de Diversidade e Inclusão na empresa Mercer Portugal – Grupo Marsh McLennan.
A minha cor é verde.
Freedom is being able to choose. After all, one free woman sets another free. No woman should be less than she is, out of fear. Feminine freedom cannot be trapped. A woman must be free to take care of herself, free to feel pleasure without fear, and free to say no.
“Freedom is not something you earn, you conquer”.
For many women, this phrase is even more accurate and, within our infinite individualities, it becomes even more personal how each one of us will reach this victory.
Freedom comes from our story.
Freedom comes from our voice.
Freedom comes from our knowledge.
Freedom comes from our expression.
Freedom comes from our body.
Freedom comes from our career.
Freedom comes from our self-worth.
When I let go of identity, judgement, and shame.
When I understood the stillness and beauty of nature.
When I accepted vulnerability, empathy,
and when I felt pure, raw love –
for me, for my body, and for what I’m worth,
I found freedom.
Diane Radelt lives in England and is a Jungian Analytical Psychotherapist. She has been a member of BodySoul Europe Holding Team.
BodySoul Europe is an affiliate of the Marion Woodman Foundation. Both hold that the psyche and soma are inseparable; therefore, body and mind are explored together in the service of healing and growth. BodySoul Programmes involve listening to the body and paying attention to unfolding dreams. In this way, guided by the Self, space is provided for the unconscious to emerge through movement, voice-work, painting, journaling, myth and mask-making.
For more information please visit: bodysouleurope.org
You may write me down in history
With your bitter, twisted lies,
You may trod me in the very dirt
But still, like dust I rise.
Does my sassiness upset you?
Why are you beset with gloom?
‘Cause I walk like I’ve got oil wells
Pumping in my living room.
Just like moons and like suns,
With the certainty of tides,
Just like hopes springing high,
Still I’ll rise.
Did you want to see me broken?
Bowed head and lowered eyes?
Shoulders falling down like teardrops,
Weakened by my soulful cries?
Does my haughtiness offend you?
Don’t you take it awful hard
‘Cause I laugh like I’ve got gold mines
Diggin’ in my own back yard.
You may shoot me with your words,
You may cut me with your eyes,
You may kill me with your hatefulness,
But still, like air, I rise.
Does my sexiness upset you?
Does it come as a surprise?
That I dance like I’ve got diamonds
At the meeting of my thighs?
Out of the huts of history’s shame
I rise
Up from a past that’s rooted in pain
I rise
I’m a black ocean, leaping and wide,
Welling and swelling I bear in the tide.
Leaving behind nights of terror and fear
I rise
Into a daybreak that’s wondrously clear
I rise
Bringing the gifts that my ancestors gave,
I am the dream and the hope of the slave,
I rise
I rise
I rise.
Maya Angelou
BSc. Biomedical Science
Ph.D. in Immunology
SYC Authorised Ashtanga
Yoga Teacher
YIHA Certified Yoga Teacher
Listener of details and scents
Sister of three
Choice
To act
and be an observer
Expression
A rest in comfort,
Safety to explore every layer of self
A non-quivering breath
Sou de vários espaços e tempos.
Adoro terra, vento, água e uma boa história.
Curiosa, interessada e eterna aprendiz.
Gosto de criar beleza, gosto de arte, design, móveis.
Gosto de fazer várias coisas, e muito de pessoas e de ligações entre elas. E de fazer desabrochar coisas novas.
Gosto de te ouvir, para depois escrever sobre ti.
Ir dar um mergulho na praia.
Ir passear à serra.
Estudar o que quero.
Expressar as minhas ideias.
Trabalhar no que gosto.
Comer o que quero.
Beber o que quero.
Pegar no carro e conduzir sem destino.
Não é para todas.
Tomar decisões.
Fazer escolhas.
Mostrar a minha cara. O meu cabelo. Os meus braços ou pernas!
Sair à rua sozinha.
Falar com quem quero, como quero, quando quero.
Ser a única dona e senhora do meu corpo.
Ter ou não ter filhos. Ficar solteira toda a vida.
CASAR COM QUEM QUISER!
Divorciar-me se quiser…
Não, não é para todas.
E enquanto não for para todas, não é – verdadeira e inteiramente – para nenhuma. Porque somos uma. Somos muitas, mas somos uma.
Copywriter de publicidade e muito mais.
Mais sonhadora.
Mais Mulher. Mais Mãe.
Mais projetos na gaveta.
Cada vez menos perdida.
Eu explico-lhe, com calma, “Carmo, não é preciso gritar”.
Mas a minha filha de 3 anos, grita.
Exalta os pulmões.
Deixa sair o camões.
em cordas vocais desafinadas, a jugular a inchar,
os punhos cerrados, transformada em Hulk
segundos antes de ter sido Barbie.
vemos rasgarem-se-lhe as mangas do vestido também.
Cresce em fúria, grita. Mãe!
fica gigante mesmo a dar-me pelo joelho.
Atira-se ao chão. Músculos contraídos.
E no meio do furacão em sonorização,
no meio do tapar de ouvidos de quem a rodeia,
hoje exalto-me eu a dizer:
Tens liberdade para isso, filha.
Grita mais. Usa a voz.
Usa sempre esse som.
Da garganta faz uma arma.
Mostra ao mundo que liberdade,
Infelizmente,
ainda não é um dom.
Psicóloga, sexóloga e terapeuta de casais
Apresentadora de programa televisivos sobre sexualidade e do podcast muitomaisdoquesexo
Escritora e cronista
Mãe de dois filhos maravilhosos: Bárbara e João e “Mãe de cão” da Jackie e do Jack
Fundadora do futuro MUSEX- Museu Pedagógico do Sexo
Todxs merecemos e temos o direito a ser sexualmente felizes
Mãe do António Maria, filha da Milita e do João Maria…
Signo Sagitário.
Portuguesa de nascença, Berbere de coração.
Viveu no Deserto do Sahara.
Designer de viagens em Marrocos.
Nómada por convicção, viajante por opção… aventureira por paixão!
Ama viagens sejam elas físicas, mentais e psíquicas… E acreditem, faz muitas viagens sem sair do lugar.
Não perguntem a que horas vai chegar, normalmente nem sabe a que horas vai sair !!!
Liberdade de sentir nas mãos as areias finas do deserto do Sahara !
Vivi num país Muçulmano durante 9 anos e agradeço todos os dias de coração essa oportunidade. De aprender de perto o que significa Liberdade…
Deixa de ser um conceito abstrato que dizemos em voz alta, sem nos apercebermos do seu significado real.
Porque nunca fomos privados dela, porque a temos como garantida…
Pela primeira vez na vida pude sentir na minha pele e sobretudo na pele dos que me são mais próximos, o significado de “não ter Liberdade”.. mesmo nas mais pequenas e insignificantes coisas do dia a dia…
Experienciar de perto, tomar consciência de que existem pessoas que, em pleno séc XXI, não podem exercer o seu direito básico à Liberdade, foi talvez das lições mais duras que esta experiência me trouxe.
“Todos os seres humanos nascem livres e iguais em dignidade e direitos”
Aprendi que não, nem todos…
E que tristeza tão grande saber que nem todos podem sentir nas mãos as areias finas do deserto do Sahara sempre que o desejarem…
Psicóloga clinica
Instrutora de artes marciais
Feminista convicta
Mulher de armas
Mãe do pequeno Rafa
Together we stand, we stand against the ones
who want to bring us down.
We stand beside the ones who suffer,
the ones who lost the freedom we sometimes take for granted.
Sister in arms, we are with you,
and we join our voices with yours
claiming your freedom and your rights.
In a world of darkness and fear,
may our strength and our hope be your beacon of light,
to keep you going on, fierce, courageous, and hopeful.
We will never be silent, we will never back down.
We raise our voices to quiet the sound of guns and hate.
And in the words of Mary Chagnon,
and they shall beat their pots and pans into printing presses
and weave their cloth into protest banners,
nations of women shall lift up their voices
with nations of other women,
neither shall they accept discrimination anymore.
Freedom is owning your inherent power of conscious choice.
Under any given circumstances: Choose You! Not knowing the outcome but in faith that you didn’t compromise being you and loving you.
Indeed a graceful act of selflessness causing the most potent ripple effect to inspire and facilitate collective freedom.
Photographer.
Of dreams.
Of souls.
Of all sparks of life concocted in humanity.
Globetrotter.
Mother of Francisco, Laura and Miguel.
design by FalcaoLucas
© womanity.world. All rights reserved